Los festejos por la creación de la primera sala de lectura Braille para ciegos y débiles visuales en Cuba, hace hoy 35 años, tuvieron lugar en Cienfuegos donde existe mayor acceso al conocimiento y la incorporación de esas personas a la vida social.
Alexis Sarría, especialista principal de esa área especial en la Biblioteca Provincial Roberto García Valdés, explicó a la AIN que han impartido hasta la fecha 30 cursos sobre el aprendizaje de la escritura y lectura Braille, en los que participaron niños, jóvenes y adultos con o sin esa discapacidad.
Expresó que incursionaron en la publicación de textos escritos en este sistema como El pan del bobo, de Samuel Feijóo; el discurso dedicado a Carlos Rafael Rodríguez durante la entrega de la Orden José Martí y una antología de obras escritas por poetas ciegos cienfuegueros.
Sarría abundó que varios especialistas del territorio, e invitados de las provincias de Villa Clara y La Habana se reunieron para debatir acerca de las experiencias en estas áreas, además, se organizó un homenaje al bibliotecario e investigador José Díaz Roque, creador de esa sala de lectura de Cienfuegos, pionera en el país.
El local atesora un amplio fondo bibliográfico ascendente a 334 títulos con 919 volúmenes, entre los que destacan La Edad de Oro, de José Martí y En nombre de la rosa, de Umberto Eco.
Cuba cuenta con más de un centenar de salas de lectura Braille que facilitan el vínculo de las personas con capacidades diferentes a las tecnologías y su superación cultural, lo cual contribuye en el mejoramiento humano.
(Tomado de Cinco de Septiembre)
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